Ruta OR5

Puentes del Concejo de Cabrales .

Ruta OR5 (Google Maps)

La ruta OR5 tiene su aproximación desde Arenas de Cabrales. Al llegar a dicha localidad, tomaremos la carretera AS-264 en dirección a Poncebos. La carretera transcurre paralela al río Cares, disponiendo de algunos sitios donde, si están libres, dejar nuestro vehículo y poder bajarnos, con las debidas precauciones, para contemplar los rápidos y la gama de colores, turquesas y esmeraldas, así como la limpieza y pureza del agua.

El primer puente que vamos a visitar se encuentra en Poncebos, a donde llegaremos después de recorrer 6 km. Intentamos buscar aparcamiento en las inmediaciones de los establecimientos hosteleros que hay nada más llegar a nuestra derecha. Nos dirigimos entonces caminando hacia el inicio de la conocida Ruta del Cares, para encontrarnos a nuestra izquierda el paso natural sobre el Cares en dirección a Bulnes. Se trata del Puente de la Jaya (43.25386, -4.83706 ), de un solo arco de grandes dimensiones y en un estado de conservación bueno.

Puente de la Jaya, Cabrales

En un bello entorno, es fácil bajar al lecho del río por la parte de aguas arriba. Mayores precauciones debemos seguir si lo hacemos por la parte de aguas abajo. El sonido de las corrientes de sus aguas cristalinas, junto con unas de las joyas del patrimonio más significativas de Asturias, transmiten una sensación de libertad y paz, en pocos lugares encontrada.

Continuamos la ruta, en dirección a Sotres. Llegaremos al siguiente puente de esta ruta cuando nos aproximemos a Tielve, a 6 Km desde Poncebos .

Pasando el cementerio del pueblo, a nuestra derecha, llegamos a un conjunto etnográfico, indicado en las inmediaciones, formado por el Puente Saleras (43.26351, -4.77815 ) y un molino, en desuso.

El puente es de un solo arco y de perfil alomado. Se encuentra en buenas condiciones, aunque mejorables. Salva el curso del río Duje y conserva el empedrado, tanto en su calzada como en sus petriles.

Puente de Saleras, Cabrales

Se puede acceder al lecho del río por la parte de aguas arriba y disfrutar tanto del puente como de las aguas cristalinas, con su transparencia y su sonido que es música para disfrutar de este rincón en plena naturaleza. Con precauciones, incluso se puede cruzar al otro lado y contemplar el arco del puente con todo detalle.

Una vez que hayamos disfrutado del Puente Saleras, podemos aprovechar la oportunidad de adentrarnos en Tielve, a nuestra izquierda, nada más emprender de nuevo nuestra marcha. Aunque no dispone de mucho aparcamiento, merece la pena callejear entre sus casas, donde hay varios alojamientos hosteleros y una quesería. Si lo preferimos, podemos hacerlo a la vuelta, ya que volveremos a descender por aquí, una vez hayamos completado la ruta completa.

Seguimos en dirección a Sotres, hasta que después de recorrer 4.7 km, llegamos a una curva muy pronunciada a la izquierda y en tramo ascendente, donde a la izquierda hay sitio para varios vehículos. Si tenemos suerte, podemos aparcar ahí. Si no fuese así, podemos coger un desvío a la derecha hacia Aliva y Urriellu, con muchas precauciones y muy despacio. Después, 1 km girando a nuestra derecha, al llegar a los invernales del Texu o majada de Cabao, nos metemos entre las cabañas sobre nuestra derecha, tanto si vamos a pie o con nuestro vehículo, hasta llegar al puente sobre el río Duje.

Pocos metros más abajo, cerca de una cabaña, se encuentra un puente de maravillosa factura, en buen estado de conservación y salvando el paso sobre el mencionado río. Se trata del Puente Cabao (43.22714, -4.75627).

Puente Cabao, Cabrales

Se puede visitar con muchísima facilidad por todas sus vertientes, disfrutar del entorno, fotografiarlo y tener esa sensación que sólo se puede tener en parajes puros y limpios como donde nos encontramos.

Si hemos llegado a pie hasta este lugar, desde la carretera CA-1, sólo debemos volver a la parte alta del grupo de cabañas y seguir la ruta a pie hacia nuestro siguiente objetivo. Si no fue así, debemos asegurarnos de que donde hemos estacionado no está prohibido, cosa que sabremos porque hay señales que así lo advierten.

Hasta las Vegas de Sotres y con mucho cuidado podríamos llegar con un vehículo aunque no sea alto, pero aconsejo que se haga como último recurso. De cualquier forma que lleguemos, lo habremos hecho después de recorrer 2.3 km. Si lo hacemos a pie, tardaremos unos 40 minutos. En coche, unos 10.

Una vez que lleguemos a este lugar, con cabañas y ganado en las praderías cercanas, divisamos una panorámica impresionante de los Urrieles. Seguimos caminando por la pista al lado de las cabañas hasta que, en un tramo ascendente, llegamos al último de los puentes de esta ruta. Se trata del Puente de las Vegas de Sotres (43.19901, -4.7642). Consta de un solo arco, en buen estado de conservación y, como en el caso del Puente Cabao, sirve de paso sobre el Duje. Lo podemos disfrutar con comodidad, así como del paisaje y el silencio que nos envuelven de tal manera que siempre nos desagrada tener que abandonar este paraíso natural.

Puente de las Vegas de Sotres, Cabrales

Volvemos a la “curvona” de la CA-1, al principio de la pista de tierra que nos trajo hasta aquí, y no debemos irnos de vuelta sin seguir subiendo por la carretera hasta llegar a Sotres. Atravesamos el pueblo, transcurriendo por el centro del mismo hasta que vemos un indicador hacia el aparcamiento, en la zona alta a la izquierda. Desde allí podemos visitar todo el pueblo a pie disfrutando de casas con encanto, algunas de ellas como alojamientos rurales.

No debemos perder la oportunidad de ascender a nuestra derecha hasta el Mirador de los Jorcaos, desde donde podemos ver, en una panorámica que no tiene precio, los Invernales del Texu, donde estuvimos anteriormente, y toda la ruta que asciende hacia las Vegas de Sotres y hacia Espinama, ya en Cantabria.

A la vuelta, si nos adentramos en el corazón de Sotres, tenemos desde alojamientos rurales, hasta varios establecimientos hosteleros, pasando por queserías y alguna tienda de recuerdos. No debemos dejar de visitar ambos lados del pueblo, ya que muchas veces dejamos de visitar la parte derecha de la entrada al pueblo y merece la pena porque se disfruta de una visión diferente a la que estamos acostumbrados normalmente en nuestras visitas a este pueblo paradisíaco.

Y ya puestos, después de hacer un descanso y reponer fuerzas en Sotres, a 11 km carretera arriba, pasando por lugares donde nos podremos detener a disfrutar de todo lo que nos ofrece el camino, podemos visitar Tresviso, primera localidad de la vecina Cantabria. Tiene una quesería, de una variedad de queso azul de la localidad, muy conocida y prestigiosa, y dos establecimientos hosteleros, uno de ellos cerrado en época invernal.

Debemos volver hasta Sotres de nuevo, ya que la comunicación con la vertiente cántabra, hacia el desfiladero de La Hermida, sólo puede hacerse a pie, por lo que los vecinos de esta localidad dependen de Cabrales para cubrir muchas de sus necesidades básicas. Incluso en época invernal, en ocasiones, les llegan provisiones a través de helicópteros.

Nos queda aún el privilegio de volver a recorrer todo lo que hemos ascendido desde Arenas de Cabrales y disfrutar de nuevo, con una visión diferente de esta maravillosa ruta. Merece especial mención la vista que hay llegando a Sotres, en un tramo descendente de la carretera, que es una de las más fotografiadas del techo de nuestro particular paraíso.